
Seguramente a estas alturas, el menú para la cena de Nochebuena o el día de Navidad estará más que pensado. Pero si, igual que a nosotros, se os ha echado el tiempo encima y aún estáis por decidir qué poner en la mesa, os proponemos esta receta fácil de hacer y buenísima que será un éxito asegurado.
Y es que pocas cosas quedan tan bien y con tan poco esfuerzo como unas carrilleras al vino, ya sean de cerdo, como preparamos en otra ocasión, o de ternera, que hemos utilizado esta vez, algo más caras -aunque tampoco nada desorbitado- y que elevan el plato a otro nivel.
Las hemos cocinado con unas setas y puerro. Dejamos margen para añadir las clásicas ciruelas u orejones que también le sentarían de maravilla, y las hemos servido sobre una cama de puré de patata. Los únicos secretos son utilizar carne de buena calidad, un vino medianamente decente y fuego lento. Feliz Navidad.
Ingredientes (para 2-3 personas)
- 1-2 carrilleras de ternera (dependiendo del tamaño)
- 1 puerro
- 1 diente de ajo
- Unas hojas de perejil fresco
- 150 gramos de setas
- 2 hojas de laurel
- 1/2 cucharadita de canela en polvo
- 1/2 cucharadita de nuez moscada en polvo
- 700 ml. de vino tinto
- 1 cucharada de harina
- Sal
- Pimienta
- Aceite de oliva virgen extra
Preparación
- Quitamos el exceso de grasa de las carrilleras. Las cortamos en dos o en varios trozos y salpimentamos.
- Desechamos la parte verde del puerro, la punta y la primera capa exterior de la parte blanca. Lo lavamos y cortamos en rodajas de medio centímetro.
- Lavamos las setas y quitamos la tierra que puedan tener. Las secamos con papel absorbente. Nosotros hemos usado trompetas amarillas (gula de monte) y al ser de tamaño pequeño las hemos dejado enteras. Si usamos otra variedad más grande podemos trocearlas.
- Echamos aceite en una cazuela y sofreímos el puerro unos minutos, dando la vuelta a las rodajas de vez en cuando para que no se quemen. Hay que vigilar porque el puerro se quema con más facilidad que la cebolla.
© Emma García - En una sartén con un poco de aceite sellamos la carne a fuego fuerte un minuto por cada lado. Reservamos.
- En la misma sartén, a fuego medio, echamos un poco más de aceite -si es necesario- con el ajo previamente picado o machacado con un prensador.
© Emma García - Lo doramos y añadimos las setas y el perejil con un poco de sal y pimienta.
- Saltemos un par de minutos.
- Reservamos la mitad de las setas y añadimos la otra mitad a la cazuela con el puerro. Añadimos también el laurel.
© Emma García - Agregamos la harina, mezclamos bien y cocinamos un par de minutos para que no tenga sabor a crudo.
- Añadimos las carrilleras, las especias, la sal y el vino.
- Subimos la potencia del fuego para que el alcohol se evapore durante 2 minutos.
- Bajamos el fuego a mínima potencia y tapamos la cazuela. Lo ideal es que las carrilleras queden completamente sumergidas en el vino.
© Emma García - Cocinamos durante 2-3 horas, removiendo de vez en cuando, hasta que las carrileras estén muy tiernas y la carne prácticamente se deshaga.
- Opcionalmente podemos apartar las carrilleras y las hojas de laurel y triturar los vegetales para tener una salsa fina y más espesa. Como va a gustos, también se puede dejar sin triturar.
- Servimos las carrilleras bañadas con la salsa de vino y acompañadas con las setas salteadas con ajo y perejil que habíamos reservado (tocará darle a las setas un golpe de calor antes de servir).
- Las carrilleras quedan muy bien con un buen puré de patata o arroz.