Si hay una marca que en esto de la nostalgia heladera puede competir con Frigo y sus Drácula, Frigurón y compañía, es Camy. Productos como el Colajet forman parte de la historia de muchas generaciones del país.
De hecho, algunos helados de Camy siguen estando a la venta, aunque bajo el paraguas de Nestlé, que en su momento se hizo con Camy y Miko, fusionó la oferta de ambas y, por suerte, mantuvo clásicos como el citado Colajet y otro de nuestros preferidos, el MikoLápiz. Sí, ese que a veces llevaba otro de premio en el plástico rojo que sirve para ir subiendo el helado.
Lo que igual muchos no sabían es que Camy ha vuelto. En realidad, volvió hace ya tiempo, tras una rocambolesca historia judicial entre Nestlé y la fábrica original de Avidesa, creada en 1964 en Alzira y hoy todavía en marcha con la denominación Ice Cream Factory.
Muchos me estáis preguntando por el regreso de Camy, la mítica marca de helados, a nuestras calles, kioscos y bares. ¿Qué ha pasado? ¿a qué se debe?
Es una historia llena de salseo brandero así que vamos con un #gamuhilo heladero extra de verano 👇 pic.twitter.com/X11a86wdcu
— Fernando de Córdoba 🏳️🌈🏳️⚧️ (@gamusino) July 28, 2022
Un interesante hilo de Twitter ha servido para recordar esta historia legal y que, básicamente, se resume en que Nestlé ha perdido las marcas Avidesa y Camy por no usarlas, y han vuelto a manos de sus inventores.
Eso sí, han tenido que reinventar el logotipo, que ahora se ha convertido en un doble homenaje a estas dos míticas marcas, fusionando el estilo de Camy y Avidesa. Por supuesto, tampoco la gama de helados es la original de Camy, porque nombres como Colajet o Maxibon son propiedad de Nestlé.
En su lugar, la renacida Camy ha echado mano de un clásico de Avidesa que, aunque menos conocido, también tiene su tirón: los cornetes Apolo.
Al resto de la gama ha habido que buscarles nombres nuevos, con algún que otro guiño: Maxiduo, Chocopunta o Miljyfun son algunos de los nombres que luce el cartel de Camy y que, lógicamente, recuerdan a grandes clásicos de la marca.
Lógicamente porque, en realidad, lo de imitar en forma, sabor e incluso nombre a algunos de los helados más populares del mercado es algo que hacen todas las marcas, sobre todo las marcas blancas. A la mítica Comtessa. al Frigopie o al Drácula, por ejemplo, le han salido estos años unos cuantos homenajes. Mención especial, por cierto, al de Hacendado que se llama Dra-Cola.
En cualquier caso, ICFC es una de las mayores fábricas de helados de España y gran parte de su producción es para marcas blancas, así que no sería nada raro que los helados de esta nueva Camy salgan del mismo lugar que eso del supermercado que compras habitualmente.