¿Un poco hartos de tanta ensalada y de que el recetario estival se reduzca a platos fríos y muy ligeros? Si sois de los que creeis que tampoco es tan grave liarse un poco en los fogones para cocinar algo, aunque sea verano; si el calor no ha acabado del todo con tus neuronas de cocinillas; si te apetece comer bien también en verano… ahí van unas cuantas recetas que hemos rescatado de nuestro archivo.
La semana pasada ofrecimos un recopilatorio de ensaladas y pseudoensaladas, así que esta semana completamos el recopilatorio estival con platos algo más elaborados. Aunque requieran meterse en la cocina, el resultado en todos ellos es fresco, saludable y sobre todo apetecible. Todo sea por salir un poco de la socorrida ensalada.
Gofre con pimiento y queso fresco a la plancha
Un gofre salado. Como la gran mayoría de masas cocinadas, el gofre es suficientemente neutro para admitir dulce y salado. Este gofre con pimiento asado – podemos utilizar lo que nos quede del espencat – y queso fresco a la plancha es atractivo, saludable y muy rico. El resultado vale para desayuno, merienda, cena o entre horas. Es un plato todo terreno.
Enrollado de lacón y espinacas
Comer frío no es sinónimo de ensalada, o no siempre. Para ello están los sandwiches y parecidos. Con un paquete de tortillas de trigo y lo que tengamos en la nevera podemos crear auténticas delicias. Si os falla la imaginación, aquí tenéis una propuesta interesante. Enrollar lacón y hojas de espinaca tierna no tiene mucho misterio. Tampoco lo tiene preparar la salsa, que sin embargo, le da el toque definitivo a la receta.
Seguimos con sandwiches. Este de pollo al curry que sacamos del libro de recetas de Alice’s Tea Cup es perfecto para un pícnic. Quizás la mezcla de ingredientes puede asustar a más de uno, pero garantizamos que el resultado es muy bueno. Eso sí, es básico utilizar un pan de molde de calidad, no estos restos resecos que quedan en la despensa.
Dim sum de espárragos y gambas
Perfectos para cuando tengamos el día exótico. Estas empanadillas al vapor chinas se preparan en menos tiempo de lo que parece. Al ser al vapor son muy ligeras, lo que no está reñido con el sabor. Son el entrante perfecto para una cena con amigos. O porqué no, para autoregalarnos un poco de comida china de calidad.
Lasaña de calabacín, setas y tomate seco
Hay que aprovechar la cantidad de verdura buena, bonita y barata que hay ahora en el mercado. Para ello, una lasaña vegetal es siempre una buena opción. Esta de calabacín y tomate seco es de escándalo, además de muy fácil de preparar. Así no hay quién se resista a comer verdura, incluso los más reacios.
Cuscús de espinacas y ciruelas
Por las espinacas y las ciruelas parece más bien un plato de invierno. De hecho lo preparamos como receta para la post-Navidad. Pero podemos encontrar buenas espinacas también ahora, y ciruelas secas las hay siempre. El resultado és lo suficientemente ligero para ser un buen plato para estos calores. Así salimos un poco del ya muy conocido tabulé.
El plato estrella de cada verano es la paella. Incluso es protagonista – con polémica incluída – del anuncio del verano. No hay verano sin arroz. Pero si queréis salir un poco – o mucho – de la receta tradicional hay infinidad de platos con arroz muy indicadas para los calores. Esta «paella japonesa» tiene muy poco o nada que ver con una paella. Eso sí, la combinación de arroz y salmón es irresistible, como ya han descubierto hace mucho los japoneses.
Cerdo marinado con salsa de coco
Que no cunda el pánico que no nos hemos vuelto vegetarianos. Para los amantes de la carne tenemos la receta perfecta. Este secreto de cerdo marinado adquiere un sabor cítrico que casa muy bien con las altas temperaturas. El complemento perfecto para esta carne es la salsa de coco. La receta la tomamos prestada del gran cocinero camboyano Ly Leap, lo que es garantía de calidad.
Tampoco nos olvidamos de los postres. Con esta receta le damos una vuelta – y algo más – al omnipresente helado. Una forma diferente de presentar el postre para el que hay que ser algo previsor, no vale esto de acercarse al super de guardia para solucionar los postres. Si nos aventuramos, incluso podemos utilizar un helado casero, como este de judías que no puede ser más oriental.
Bebercios
Para solucionar la parte líquida, qué mejor que una sangría preparada en casa – con buena materia prima por favor – o incluso esta que hemos descubierto embotellada. No nos olvidamos del spritz, una moda importada de Italia, así como el shakerato. ¡Sí, aún queda gastronomía por importar de Italia!
Y para la postcomida o postcena un buen cóctel como el que preparamos para nuestro aniversario. Genuínamente Gulateca. O si son más de gintonic pueden probar el Porto tonic o incluso el Sake tonic. Ya saben, el gintonic no nace ni muere, se transforma.