Enrollado de lacón y espinacas con salsa de miel y mostaza

No sabemos si el plato que os traemos hoy entraría en la categoría de recetas propiamente dicha. Su preparación es tan sencilla que llega a ser insultante. Se podría decir que con esta entrada lo que pretendemos es daros ideas para aprovechar esos ingredientes descarriados que sobran de preparaciones más elaborados.

Preparar un enrollado con tortillas de trigo es una buena opción para darles salida y convertirán vuestra comida o cena de sobras en un plato nuevo, sabroso y divertido. En nuestro caso teníamos unas cuantas lonchas de lacón en la nevera y unas hojas de espinaca a punto de ponerse pochas, pero esta receta admite todas las variantes que podáis imaginar. Tomen nota.

Ingredientes

• 1 o 2 tortillas de trigo por persona
• 1 loncha de lacón o jamón asado para cada enrollado
• Hojas de espinaca

Para la salsa

• Mostaza
• Mostaza antigua
• Miel
• Yogur natural

Elaboración

Si tenéis tiempo y os apetece podéis hacer las tortillas de trigo vosotros mismos. Hay infinidad de recetas en Internet, por ejemplo, ésta de Directo al Paladar. No son muy difíciles de hacer pero, entre nosotros, si las compráis hechas tampoco pasa nada.

Lo primero es preparar la salsa de miel y mostaza. En un bol mezclamos dos cucharaditas de mostaza, una cucharadita de miel y media cucharadita de mostaza antigua. El yogur es opcional pero a nosotros nos gusta cómo queda así que le añadimos también una cucharadita. Mezclamos bien y probamos, ¿qué queréis que esté más dulce? Pues añadís un poco más de miel y listo.

Cogemos las lochas de lacón y las hacemos a la plancha, con un par de minutos será más que suficiente. A continuación, calentamos las tortillas. Si las habéis comprado elaboradas debéis humedecerlas un poco con agua y pasarlas por la plancha. Si las hacéis vosotros mismos, debéis cocinarlas antes que el lacón.

Llega el momento de hacer el enrollado propiamente dicho. Untamos la salsa de miel y mostaza en la tortilla, colocamos encima unas cuantas hojas de espinaca. Nosotros las hemos puesto en crudo pero podéis rehorgarlas antes si os gustan más así. A continuación, ponemos el lacón y enrollamos.

Os recomendamos que paséis el enrollado de nuevo por la plancha para que se cierre y esté bien caliente a la hora de comer. Ya tenéis vuestra comida de aprovechamiento lista.

Como decíamos al principio este enrollado admite infinitas variaciones: restos de jamón asado o rosbif en lugar de lacón, rúcula o acelga fresca en lugar de espinacas… Incluso podéis jugar con las tortillas de trigo. Si las hacéis vosotros mismos podéis añadir una cucharada de mostaza antigua a la masa para darles un toque distinto o un par de cucharadas de puré de espinacas para darle color.