La primera intención para este post-San Juan era hacer una receta ligera para ayudar a superar los excesos. Sí, un poco tópico, pero útil al fin y al cabo. Pero al mismo tiempo teníamos ya ganas de resarcirnos del estrepitoso fracaso de la pasta fresca -en los inicios del blog- con un plato italiano que pudiéramos cocinar de principio a fin. Y encima el miércoles conocimos la triste noticia de la muerte de James Gandolfini, o sea Tony Soprano, así que toca homenaje.
Esta última opción es la que ha ganado al final, aunque las dos anteriores también son aplicables a este plato típico de la província de Salerno, en la Campania. No puede ser más oportuno para recordar al Tony Soprano del capítulo Commendatori, donde viaja a Nápoles y se reencuentra con sus orígenes.
Así pues nos olvidamos del último ágape de Gandolfini, que ya ha trascendido, y que rompe la imágen idílica de la muerte de Soprano en Italia, en la búsqueda de sus orígenes. Mejor este plato casero, tradicional y con una salsa vegetal muy fresca y muy italiana, que hemos descubierto -y adaptado- en este libro.
Ingredientes (para 4 personas)
Para los ñoquis
- 200 gr. de harina común
- 220 gr. de queso ricotta
- 20 gr. de parmesano rallado
- 3 yemas de huevo
- Un poco de nuez moscada
- Sal
- Pimienta
Para la salsa
- Una berenjena
- 5 tomates bien maduros o una lata de tomates enteros
- Un diente de ajo
- Aceitunas negras
- Perejil o albahaca fresca
Preparación:
El primer paso es cortar la berenjena en dados pequeños y ponerla en un bol con agua y sal para quitarle el amargor.
Vamos a por la pasta. Se trata de una especie de ñoquis en los que, en lugar de patata, utilizamos queso. Para prepararlos ponemos en un bol amplio la harina con todos los demás ingredientes. Mezclamos con un tenedor y cuando estén los ingredientes bien integrados lo pasamos a la encimera y amasamos con las manos hasta conseguir una masa fina.
Amasar esta pasta tiene una única dificultad, y es que se pega mucho a las manos. Mejor que ir añadiendo harina sin fin, podemos untarnos las manos con un poco de aceite de oliva para facilitar la tarea. Y sobre todo no desesperar. En cuanto tengamos una masa más o menos fina hacemos una bola y dejamos que repose en un bol tapado con film.
Aprovechamos este momento para preparar la salsa. En una sartén con abundante aceite freímos la berenjena bien escurrida. La berenjena es una especie de agujero negro que absorve cualquier líquido a su alrededor, así que no tengáis miedo con el aceite.
En cuanto esté hecha retiramos el exceso de aceite y añadimos el ajo bien picado. Al cabo de unos minutos, ponemos el tomate -natural o en conserva- y las aceitunas troceadas. Dejamos que cueza bien, rectificamos de sal y al final añadimos perejil picado, o mejor aún albahaca fresca.
Recuperamos la pasta. En el mármol, con algo de harina, estiramos la masa o bien como si fuera plastilina o directamente con las manos como si estrujáramos. La idea es que quede como una salchicha fina. Recomendamos que separéis la masa en porciones y hagáis más de una o la sachicha va a ocupar toda la cocina.
De esta masa cortamos porciones pequeñas con un cuchillo. Van a quedar pequeños rectángulos de la medida de un ñoqui o algo mayor.
Ponemos agua abundante en una olla y en cuanto hierva metemos los ñoquis. Cuando suban a la superfície bajamos algo el fuego y dejamos que hiervan dos minutos más. Escurrimos la pasta y la añadimos a la salsa. Mezclamos bien y ya está listo para servir con un poco más de parmesano rallado por encima.
Estos ñoquis tienen un sabor muy suave a queso y combinan de maravilla con cualquier salsa a base de tomate. Pasta, tomate y berenjena es una combinación fresca, muy mediterránea y perfecta ahora que empiezan a llegar buenas hortalizas a los mercados.
Por cierto, pueden añadir un toque de glamour al presentar este plato. Olvídense del nombre ñoqui, mejor marcarse un tanto con el nombre original en italiano: ndudari con salsa di melanzane e pomodoro. ¿A que suena bien?
[…] dispuestos a darle a la pasta en homenaje a Gandolfini y Tony Soprano. Tras aquellos estupendos ñoquis con melanzzane volvemos a la carga con un ingrediente de lo más […]