Estamos en plena temporada de brócoli, entre enero y marzo podemos encontrarlo de excelente calidad y a precios razonables. Nosotros jugamos con ventaja porque teníamos en casa uno bien hermoso recién cogido del huerto y decidimos elaborar un plato de pasta algo más ligero y acorde con estas fechas post-navideñas en las que aquel propósito de año nuevo de comer más sano aún sigue vigente.
No se trata de un plato de «régimen» propiamente dicho, básicamente porque el ingrediente principal es la pasta, pero si que es un plato equilibrado, más ligero que otros platos de pasta, estupendo para llevarnos en el tupper a mediodía y que, además, está riquísimo. Su elaboración es tan sencilla y rápida que no tendréis excusa para meteros entre fogones, en 10 minutos tendréis un plato rico, completo y sano para comer hoy mismo. Tomen nota.
Ingredientes (para 2 personas)
250 gr. de fusilli (o cualquier otra pasta seca)
100 gr. de brócoli
3 o 4 lonchas de jamón serrano
1 diente de ajo
Aceite de oliva
Sal
Pimienta
Elaboración
Ponemos al fuego una olla con abundante agua con sal y un chorrito de aceite. Mientras esperamos a que hierva, preparamos el brócoli. Separamos las flores de los troncos del brócoli. En esta ocasión usaremos únicamente las flores troceadas y guardaremos los troncos para otras preparaciones como, por ejemplo, un puré de verdura. Aprovechamos también para cortar el diente de ajo en láminas y las lonchas de jamón en tiras.
Cuando el agua hierva, coceremos la pasta al dente, la escurriremos y reservaremos. En una sartén honda, echamos un chorrito de aceite de oliva, unas dos cucharadas suelen ser suficientes. Salteamos las láminas de ajo. Cuando empiecen a dorarse levemente, añadimos el brócoli y salteamos durante dos o tres minutos. Añadimos las tiras de jamón serrano y salteamos durante un minuto más.
Añadimos la pasta a la sartén y removemos bien, dejando que se mezclen bien los ingredientes. Salteamos durante un par de minutos más y listo. Emplatamos, espolvoreamos un poco de pimienta por encima y ¡a comer! Si queréis darle un toque distinto, podéis añadir piñones o nueces a la mezcla o añadirle un poco de queso rallado.
[…] acompañarla. Hay todo un mundo de posibilidades más allá de lo clásico. El otro día fue con brócoli – ¡viva el brócoli! – y ahora la acompañamos con judías pintas y una salsa de vino […]