Parece vermut, tiene el color del vermut, y su sabor recuerda al vermut. Pero en realidad no es un vermut. Al menos técnicamente, porque el vermut tiene que estar elaborado a partir de vino, y Roxmut está hecho de sidra. Y es que si cada zona reivindica su propia especialidad de vermut, en Asturias no podían ser menos, y en Llagar Castañón se han animado con el que ahora mismo pasa por ser el vermut -o no vermut, vale- más original del país.
Por allí estuvimos hace unas semanas para descubrir cómo se elabora esta bebida que se presenta -para no enfadar a los puristas del vermut- como una compuesta de sidra. ¿Pero qué es una compuesta? Nos explica Julián Castañón -responsable de esta bodega de Villaviciosa- que se trata de un nombre usado tradicionalmente en Asturias para el denominado vermut preparado, es decir, al que se le añaden otros licores a la hora de servirlo.
Ahora se recupera esta idea de hace décadas para definir Roxmut, elaborado a partir de sidra que se macera con hierbas y alcohol durante 3 meses en barrica. Aunque su sabor recuerda claramente al vermut, la presencia de la manzana con una ligera acidez final permite aligerar el clásico dulzor de algunos vermuts.

A la hora de servirlo, sus creadores recomiendan hacerlo con hielo y un poco de manzana. Que quede claro que estamos ante un vermut asturiano que viene de la sidra y que, al menos por ahora, es único. No obstante, la buena acogida que ha tenido desde que se presentó el pasado mes de marzo -nos cuentan- hace imaginar que igual otros llagares se animan a ir por este mismo camino y apuntarse con sus sidras a la moda del vermut.
Su precio de venta es de 15 euros la botella, aunque es verdad que por ahora es difícil encontrarlo fuera de Asturias, donde ya puede comprarse en el propio llagar, en tiendas especializadas y en El Corte Inglés. Y, por supuesto, cada vez en más bares.