Seguimos en casa y, al menos por aquí, en «fase cero». La buena noticia es que tenemos vinos ricos para animar estos días. Ricos y diferentes, porque quienes crean que de un tinto Rioja se puede esperar de todo menos sorpresas deberían probar Petra de Valpiedra.
Segunda añada ya del vino más personal de esta bodega que apuesta por un monovarietal de garnacha tinta. Una uva que suena casi extraña en La Rioja pero que era mayoritaria hace años. Muchos años, porque lo cierto es que durante el siglo XX fue cediendo ese protagonismo a otras variedades.
Así que este Petra es el resultado de ese trabajo de experimentación y recuperación de vides centenarias. Y una forma de asomarse a aquella Rioja de hace más de 100 años a través de un vino realmente interesante.
Aunque cabría esperar un perfil potente dado ese 100% de garnacha tinta, la verdad es que el resultado es un tinto muy delicado y bastante fresco.
Según nos confirman los expertos en esas cosas de la cata y el maridaje, lo mismo te resuelve un plato de carne que un guiso de pescado. De hecho, entre las recomendaciones figura el marmitako, lo que ya de por si solo nos anima a reservar un hueco en la bodega a a una botella de este Petra de Valpiedra.
Variedades: garnacha tinta
Zona: D.O.Ca Rioja
Para hacerte el listo: solo se han producido 4.613 botellas de esta añada, así que no te lo pienses demasiado porque duran pocos meses
Precio: 40 €