¿Por qué noodles en lugar de fideos? Porque suena más aparente. ¿Por qué tofu? Porque teníamos un trozo por la nevera y la verdad es que no se nos ocurría qué hacer con él. ¿Por qué kimchi? Para darle un toque aún más oriental y original al plato.
Hechas las correspondientes explicaciones, ¿qué es el kimchi? La versión resumida es que es col china fermentada con un sabor muy potente y también bastante picante. Así que puede ser el complemento ideal para alegrar el insípido tofu que, dicho sea de paso, tampoco sería ninguna locura sustituir en esta receta por una buena carne de cerdo. A no ser, claro, que queramos que siga siendo un plato vegetariano.
Ingredientes
- Unos 100 gr. de fideos de arroz por persona
- 2 zanahorias
- 200 gr. de tofú
- Una lata de kimchi (en los supermercados orientales hay)
- Salsa de soja
- Aceite de girasol
- Aceite de sésamo (opcional)
Preparación
Fácil no, lo siguiente. Preparamos los fideos -perdón, noodles- según las instrucciones. Si son muy finos normalmente basta con sumergirlos unos minutos en agua muy caliente. En este caso hemos optado por unos de mayor grosor (recomensable) y en 3 minutos hirviendo en agua ha sido suficiente. Escurrimos y reservamos.
En un wok o cualquier otro recipiente lo más antiadherente posible, chorro de aceite de girasol -mejor que el de oliva para recetas en plan oriental- añadimos la zanahoria troceada en tiras. La idea es que queda crujiente y casi cruda, así que no tardamos mucho en añadir el tofu cortado en dados o tiras y el kimchi, también picado. Si tenemos a mano aceite de sésamo, podemos añadir un poco aunque con mucha moderación.
Salteamos unos minutos. Los malabarismos con el wok para remover la mezcla a golpe de muñeca son opcionales, pero si tenemos público puede quedar muy bonito. Añadimos también un buen chorro de salsa de soja y los fideos ya hechos. Para ayudar a ligar un poco todo se puede echar también un poco del agua de la cocción de los noodles.
Como el kimchi es muy fuerte y la soja lleva mucha sal, hay que tener cuidado a la hora de salar los ingredientes o el plato. Mejor quedarse un poco cortos y corregir a última hora cuando ya esté casi listo.
En menos de 15 minutos, preparado.