El prestigio, la revolución y las portadas son una cosa. La rentabilidad es otra. Mientras ya hay quienes cuestionan la permanencia de la cocina española en lo más alto del pódium gastronómico internacional, hay una cosa que está clara: a la hora de hacerse millonarios, los chefs del país no están a la cabeza.
Así lo demuestra la reciente lista que, como cada año, publican Forbes y The Richest con los cocineros más adinerados del planeta. Un ranking en el que, según leemos en La Vanguardia, no aparece ni un solo cocinero español entre los 20 primeros puestos. Y es que, más allá de las estrellas Michelin y los puestos en la lista de los mejores restaurantes del mundo, está claro que el auténtico negocio va por otro lado. Y tiene mucho que ver con la televisión, por cierto.
¿Y quién es el chef con más ceros en su cuenta corriente? Aunque Jamie Oliver es el primer nombre que viene a la cabeza y, de hecho, ha encabezado la lista durante mucho tiempo, en los últimos años el número uno es Alan Wong. De origen japonés, es su cocina hawaiana lo que le ha convertido en un chef millonario, aunque sea relativamente desconocido. Según los datos de esta lista, su fortuna asciende a mil millones de euros.
El imperio de Oliver -restaurantes, libros, programas de televisión y decenas de productos- le permite mantener el segundo puesto, aunque sus cifras (210 millones de euros) suenan a poco comparadas con las de Wong. Suficientes, eso sí, para imponerse a otro de los que mejor se manejan entre la alta gastronomía (tiene nada menos que 14 estrellas Michelin) y el mundillo televisivo: el temible Gordon Ramsay, el malo original de MasterChef y Pesadilla en la Cocina.

Wolfgang Puck -el cocinero de los Oscar– ocupa el cuarto puesto, mientras que el quinto lugar es para otra estrella de televisión: Rachel Ray. Precisamente los programas en la cadena estadounidense Food Network -y la correspondiente fama y negocios- parecen ser un auténtico trampolín para hacerse de oro. Así lo demuestran Emeril Lagasse (sexto lugar del ranking) e Ina Garten, en el séptimo puesto.
La fama televisiva y su cadena de restaurantes justifican el octavo puesto de la también estadounidense Paula Deen. Este claro dominio de chefs norteamericanos e ingleses se mantiene hasta el noveno lugar (Mario Batali, estadounidense de raíces italianas) mientras que hay que llegar al último puesto del top 10 para toparse con el francés Alain Ducasse.
¿Y los españoles? Aunque no hay datos oficiales sobre las cifras que mueven los chefs nacionales ni un ranking claro, las teorías oscilan entre situar al mediático Karlos Arguiñano y al internacional Jose Andrés -auténtica estrella en Estados Unidos- en la primera posición de los chefs españoles con mayor patrimonio.
Mario Batali, no es Italiano, es Estadounidense de origen Italiano, nacido en Seattle. Ha y que informarse un poco antes…..
Tienes toda la razón Rodrigo. Nos hemos dejado llevar por el tipo de cocina que hace Batali. Ya está corregido
Saludos