Si el mercado de leches vegetales no para de crecer y el aguacate sigue siendo la fruta de moda, era solo cuestión de tiempo que alguien decidiera combinar estos dos hits para, alehop, inventar la leche de aguacate. No, los aguacates no se ordeñan igual que tampoco la avena, el arroz o la soja.
Hecho el correspondiente chiste, veamos qué es esto del Avocado Milk que, tras triunfar en Australia, llega ahora a Estados Unidos y, por supuesto, no tardaremos demasiado en verlo en los locales más healthies del país y en los brunchs que quieren estar a la última.
Elaborado a base de leche de avena y un 40% de aguacate triturado (vaya, que tiene más avena que aguacate), sus creadores prometen que esta bebida de color verde sabe como el aguacate y, sobre todo, mantiene todas las propiedades que se le atribuyen a esta deliciosa fruta.
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Por la pinta y la consistencia, no parece que estemos ante una leche vegetal –en realidad no se pueden llamar leche, ya lo sabemos– pensada para sustituir a la de vaca, sino más bien ante un producto tipo batido o smoothie para consumir tal cual o añadirle algún que otro ingrediente. Vaya que, a diferencia de la de almendra o soja, no vamos a preparaos un cortado con esta de aguacate.
De hecho, lleva poco en el mercado pero ya tienen una versión estándar y otra con cacao que, por supuesto, promete obrar casi milagros en nuestra salud, sistema inmunológico y demás. Al menos es verdad que no dicen que sea detox. Y también nos alegra leer que está elaborado con aguacates feos y descartados de los lineales de venta directa.
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A la venta por ahora solo en un centenar de supermercados de Estados Unidos, no hace falta echarle mucha imaginación para suponer que acabará llegando a Europa. Y posiblemente triunfando, aunque en algunos países tendrá que adaptar su nombre a la legislación sobre bebidas vegetales. ¿Precio? En la web oficial venden packs de 6 botellas pequeñas (380 ml) por unos 24 dólares.
