
Nos gusta la gastronomía y nos encanta la fotografía a la que, como alguno igual ya sabe, dedicamos nuestra otra media vida. Así que el concurso Pink Lady Food Photographer se ha convertido en una cita imprescindible a la que cada año nos acercamos con curiosidad para descubrir cuáles son, según este certamen organizado por las manzanas Pink Lady, las mejores fotos gastronómicas del año.
Y un año más nos encontramos con una selección tan amplia como impresionante, y en la que el titular vuelve a ser claro: la gastronomía, la comida, va mucho más allá de esas preciosas fotos de mesas de madera vintage atiborradas de ingredientes de colores, vajilla cuidadosamente descascarillada, aguacates y granola con arándanos.


También hay espacio para el estilismo gastronómico, los bodegones y las fotos de producto entre las 24 categorías, claro. Pero hay vida más allá de esas fotos que inundan las redes sociales. Y, de hecho, la mayoría cuentan y muestran cosas bastante más interesantes.
Es más, puede que la elegida como mejor foto del año sorprenda a muchos. O golpee, mejor dicho. Posiblemente eso pretende y consigue la instantánea de KM Asad, con una fila de niños esperando con sus platos la comida en un campo de refugiados rohingya. Sí, esto también es fotografía gastronómica, aunque te quite el apetito.


Más de 9.000 fotógrafos de 70 países han participado en esta nueva edición de un concurso con un gran nivel, premios cuantiosos -5.000 libras para el fotógrafo del año- y prestigio internacional, pero que sigue sin ser demasiado conocido en España.
Por cierto, de entre los miles de participantes, solo un fotógrafo español se cuela en la lista de premiados y destacados: Fernando Lázaro-Quintela por esta foto en blanco y negro que obtiene una mención de honor en el apartado dedicado a fotos hechas con el móvil.

La larga lista de categorías y ganadores recorre todos los ámbitos del universo gastronómico, desde la comida callejera, a la recolección de los ingredientes, la cocina, las cuestiones políticas que rodean a la alimentación, el vino o incluso las bodas desde una perspectiva gastronómica.



Esta es solo una pequeña selección de algunas de las imágenes premiadas este 2020, pero merece mucho la pena pasarse por la galería completa en la web oficial del certamen y dedicarle unos minutos a ver todas las fotografías ganadoras. Es posible, eso sí, que después ya no te parezca tan interesante el Instagram de tus foodies favoritos.


