La putanesca (sugo alla puttanesca) va ligada indefectiblemente a los spaguettis. Juntos -spaguettis y putanesca- forman uno de los platos clasiquísimos de la cocina italiana. La receta es de origen napolitano y, como su nombre parece indicar, podría haber nacido en los burdeles de la ciudad, aunque sobre esto hay debate.
Spaguetti a la putanesca hemos visto muchos. ¿Pero que pasa si utilizamos esta misma salsa -con alguna variación- con algo que no sea pasta? Con garbanzos ha resultado ser una gran combinación. La salsa se prepara muy rápido y el toque picante le va de maravilla a las legumbres. El resultado es más ligero que un guiso con chorizo y ya que estamos, es otro plato para economías de guerra.
Ingredientes
- Garbanzos cocidos (o de bote)
- 4-5 filetes de anchoa en aceite
- Una cucharadita de alcaparras
- 2 dientes de ajo
- Pimiento de espelette en polvo (o guindilla, cayena…)
- Hierbas aromáticas secas (orégano, albahaca…)
- Aceitunas negras
- Tomate natural triturado
Preparación
Damos por supuesto que ya tenemos los garbanzos cocidos, sea de la forma que sea. Así que pasamos directamente a la salsa, que se prepara en menos de 10 minutos.
Picamos los dientes de ajo y los doramos ligeramente en una sartén con aceite de oliva. Vigilamos que no se quemen o amargará la salsa. Añadimos los filetes de anchoa cortados en dados y removemos bien. Deben casi deshacerse en el aceite.
Entonces añadimos una cucharadita de las hierbas secas y el pimiento de espelette. La receta canónica es con perejil, orégano fresco y con guindilla. Nosotros hemos utilizado hierbas secas porque es más fácil tenerlas a mano en casa y nos salvan en caso de improvisación. También es cierto que no cuesta nada tener unas macetas con algunas hierbas a mano, a no ser que, como nosotros, seáis asesinos de plantas en serie.
Sobre el picante, hemos tenido tentaciones de utilizar sriracha, la última moda gastrohipster. Hubiera sido demasiada fusión. En cambio hemos optado por el pimiento de espelette, de un picante moderado. La cantidad depende del gusto de cada uno, porque en esto del picante cada uno es de su madre y de su padre.
Íbamos por las hierbas y la pimienta. No deben estar en el aceite caliente más que unos segundos. Enseguida añadimos el tomate triturado, las alcaparras y las aceitunas cortadas en láminas. Dejamos que cueza unos 6-7 minutos, rectificamos de sal -atención que la anchoa le da potencia de sabor- y tenemos la salsa lista.
Incorporamos los garbanzos y damos un par de vueltas para que liguen bien los ingredientes y los garbanzos se calienten. Al servir podemos espolvorear con perejil fresco picado o servirlo tal cual.
Ten claro que este Domingo la hago ¡menuda pinta! Gracias