En estos tiempos en los que cada vez hay más aplicaciones que permiten reservar un restaurante desde el teléfono móvil y que incluso aquello de llamar da pereza, hay un restaurante que ha decidido tomarse al pie de la letra eso del slow food. Y no sólo para cocinar, sino para conseguir mesa.
Y es que en The Lost Kitchen (Maine, Estados Unidos), la única forma de hacer una reserva es enviando una carta. Sí, de las de toda la vida, en papel, buzón y todo aquello. «Nos gustan las cosas a la vieja usanza», explica el chef de este restaurante un tanto perdido -de ahí su nombre- pero que resulta ser uno de los más populares de la zona.
De hecho, conseguir una de las 40 mesas disponibles resulta bastante complicado, así que los propietarios probaron el año pasado un sistema muy peculiar, según relatan en The Independent: las reservas telefónicas se abrieron el día 1 de abril pero, tras recibir más de 10.000 llamadas, quedó claro que no era muy práctico.
Aunque la fecha hace pensar que todo es una inocentada del April Fools’ Day, no parece ser el caso, porque como se puede ver en la web del restaurante, el sistema de reservas para esta temporada 2018 sólo deja una única opción: el correo postal.
Pero la cosa no queda ahí, porque no basta con enviar una carta -incluso las dimensiones del papel están claramente especificadas- sino que hay unas fechas concretas y una selección posterior.
Así, quienes quieran conseguir una de las codiciadas mesas de este restaurante tendrán que enviar su petición por correo entre el 1 y el 10 de abril. Como posiblemente no habrá mesa para todos los que se animen a recurrir al papel y el buzón, el día 11 los responsables del local -realmente idílico a la vista de las fotos- realizarán un sorteo para ver quiénes son los afortunados.
Sin duda, una alternativa de lo más original y romántica en estos tiempos que corren y que, además, parece haber sido bastante bien acogida entre los candidatos a llenar sus mesas. ¿Algún restaurante por aquí que se atreva a probar algo parecido?
Je je je espero que el cartero sea joven y corra porque como sea un viejo el restaurante cierra y el cocinero que sea rápido ya que con tanto retraso en reservar lo menos que quiere uno es esperar.
Ummmmm ¿existen sellos con tanta tecnología como hay hoy?