No hace falta ser un experto en el tema para saber que Vega Sicilia es uno de los vinos más caros de España. En realidad, es una bodega con varias referencias y marcas (Único, Valbuena 5º…), pero ya nos entendemos. Para todo, el mundo Vega Sicilia es sinónimo de vino bueno y con precios muy elevados.
Tampoco hace falta un máster en enología para situar Tío Pepe como una de las bodegas míticas y veteranas de Jerez. Y los vinos generosos que se elaboran en esta región, como uno de los patrimonios vinícolas más interesantes del país. Y, curiosamente, muchas veces más aplaudidos y bebidos fuera que dentro. Por situarnos, una botella de fino de Tío Pepe anda sobre los 7 euros en cualquier tienda o supermercado.
Pero el caso es que no siempre ha sido así. Hubo un momento en el que este fino se cotizaba mucho más que el famoso tinto de Ribera del Duero, hasta el punto que una botella de Tío Pepe llegaba a costar el doble en un restaurante que un mítico Vega Sicilia.
Así se puede ver en una carta de vinos del restaurante Lhardy de Madrid, que hace unos días compartía Eric Vernacci, miembro de la Academia Madrileña de Gastronomía y muy conocido en las redes por sus visitas a los mejores restaurantes del país y su exquisito gusto con los vinos.
Cuando los vinos de Jerez eran la parte cara de la carta.
Un Tío Pepe mas que doblaba en precio a un Vega Sicilia. pic.twitter.com/ae4t6tvO80— Eric Vernacci (@EVernacci) September 13, 2022
Tal y como consta en la citada carta, la botella de Tío Pepe andaba por las 15 pesetas y, de hecho, era una de las referencias más económicas dentro del apartado de vinos de Jerez que aparece. El Vega Sicilia tinto, sin embargo, se cotizaba a 6 pesetas la botella y el blanco -también había Vega Sicilia blanco en la época- a 10 pesetas.
Hace muchísimos años de aquello, posiblemente un siglo. No hay fecha exacta de la carta pero, por las añadas de los vinos, cabe situarla entre 1920 y 1930. Pero no deja de ser curioso el protagonismo de los vinos de Jerez en la época, cuando ahora todavía son casi una rareza en la mayoría de restaurantes del país.
¿Y qué ha pasado con los precios? De costar más del doble que un Vega Sicilia, ahora mismo la comparación sería absurda: frente a esos 7 euros del citado fino, con un Vega Sicilia Único empezaríamos a hablar a partir de 300 euros como poco.
Las explicaciones a este cambio son de sobra conocidas: alta producción, guerra de precios entre bodegas de Jerez, vinos muy complejos como para poder comunicarlos de forma sencilla… Y aunque es verdad que en los últimos años se está haciendo un gran trabajo para reivindicarlos, cuesta imaginar que su popularidad y reconocimiento (en el mercado, más allá del pequeño y cerrado mundo del vino) pueda volver a ser el de hace un siglo.