Consejo de primero de roscones: compres artesano o de supermercado, mejor ponle tú la nata en casa antes de comerlo. Si es un buen roscón de pastelería, saldrá más barato sin el relleno. Si es industrial, la nata montada que prepares en casa será notablemente mejor que la que lleve de serie el roscón de turno. De hecho, puede que incluso no sea ni nata.
¿Nata de bote? Es la opción rápida y cómoda, pero en realidad montar nata casera es muy sencillo, y con un par de trucos quedará perfecto y hará que la nota de tu roscón suba muchos puntos. Incluido, por supuesto, si te has animado con un roscón casero y quieres servirlo con una generosa capa de nata en su interior.
Estás son las claves para conseguir en casa una nata montada rica, que no se baje a los 10 minutos, y que convierta cualquier roscón en uno de categoría:
- Utilizar nata con más de un 35% de grasa. Lo ideal sería con un 40%, pero no es fácil encontrar en el supermercado. Algunas marcas como Central Lechera Asturiana ya ofrecen formatos por encima del 35% que funcionan muy bien.
- Importante: todo muy frío. Y cuando decimos todo nos referimos no solo a la nata, sino a que el bol para batir, o las varillas, mejor si están unas horas antes en el congelador. Puede parecer exagerado, pero funciona.
- Batir no muy rápido. Si lo hacemos a mano, no hay problema. Si usamos una batidora, nos ahorraremos unos minutos y agujetas, pero es importante hacerlo a velocidad suave y con paciencia, al final la nata se montará. Subir la velocidad para conseguirlo más rápido no ayuda en nada. ¿Cuánto tiempo? Dependerá de muchos factores, pero se ve con facilidad cuando la nata está lista.
- Azúcar glass. Un truco que funciona muy bien es usar azúcar glass en vez de azúcar normal. La vamos incorporando poco a poco cuando veamos que la nata empieza a montarse. ¿Cantidad? Al gusto, pero para 200 ml de nata líquida nosotros solemos usar 100 gramos de azúcar glass.
- Para que quede más consistente. Aunque con estos consejos ya conseguirás una nata montada casera estupenda, hay un truco más que puede venir muy bien si queremos que aguante algo más de tiempo como relleno del roscón y sin perder consistencia: añadir un sobre de los que se usan para preparar cuajada. Lo hemos probado (un sobre para 200 ml de nata) y la verdad es que resulta infalible y mucho más fácil que las gelatinas o estabilizantes que vemos que se recomiendan en algunas recetas.